El Juego del Ángel

Te vi, caminabas hacia mi casa y yo sentía que me dormía. Al parecer, siempre que tengo que hacer algo al día siguiente, estoy agotada. Tu perfume me daba rechazo, por suerte no hablaste por como 40 minutos, porque estaba irritada, ansiosa, ponéle el nombre que quieras. No podía soportar la idea de besarte y cada detalle tuyo me empezaba a molestar. De repente, vi a mi padre en él. Claramente, tenía diferencias pero algunos gestos me recordaban a él. Después pude distenderme mejor. Ayer cuando le escribía al ruiseñor, vi demasiada bronca en mí. Estoy agradecida de tenerlo en mi vida. Ruiseñor, prometo mandarte una foto de tu nombre escrito en ketchup jajajajaja. Leí un par de frases de Cortázar, algo que nunca hago porque siempre me resultó irritante, y de repente, las frases se aplican a mi vida, creo que a la mayoría de la gente pero me dan ganas de llorar. Quisé buscar algo que escribió pero no lo encontré. Su poesía, me tocó en lo más profundo de mi corazón y miro lo que escribo y

Ruiseñor, hoy te quería escribir pero no lo hice porque no quería molestarte. A veces escribo acá lo que no puedo decir. Es viernes por la noche, el agua del aire acondicionado se desborda, y seguro la vecina se enoje. Sin embargo, no me importa. Hay días que sabes que no me puedo levantar de la cama. Quizás me guste estar en la cama o quizás estar en la cama es lo que me genera estos dolores. Me duelen mucho las cervicales y los brazos. Entre ayer y hoy, a la tarde tomé los miorrelajantes pero me hicieron mucho efecto al punto que hoy no podía hablar ni modular. Me recordó a un día en el que estaba así pero por otras razones y eran sedantes. Es gracioso lo que uno se queja cuando está flaco y cuando uno aumenta bastante de peso piensa "mierda, ¿de qué me quejaba?". Yo trato de luchar por una sociedad en que acepte el cuerpo como es, o al menos eso intento, desde donde puedo pero creo que también soy hipócrita, porque aunque estaba empezando a querer mi cuerpo, ahora lo odio.

Mi dolor de cabeza y de estómago son fuertes, pero no te quería dejar de escribir este email. No te lo mando porque ya me siento un estorbo pero como muchas veces te dije: no tengo con quien hablarlo. Ahora que J. me contó sobre todo lo que pasó, la admiro. Está haciendo lo que le gusta y lo hace bien. Es como yo que me sentía un fracaso como traductora y me di cuenta que solamente la parte legal no era lo mío. Y me divertí traduciendo la parte audiovisual y la literaria. Siento que tengo una úlcera en el estomago, o quizás sea reflujo, no sé pero duele mucho. No me sorprendería que la ansiedad se canalice ahí, si lo hizo a través de la ansiedad por comer, el insomnio que todavía continua, y las cervicales que todavía me matan, que ahora se centre ahí, sería normal. O quizás si sea ansiedad pero ansiedad por W. no sé porque me puse de novia, no lo veo. Él se va a volver a su país el 28 de marzo, va a pasar 2 meses en Chile y yo me voy un mes a Italia, entonces serían reales 1 mes y 27