Entradas

Mostrando entradas de agosto, 2014
Me preguntaste si me gustaba escribir y titubie y te dije: si, puede ser; mientras tenía una birome en la mano y mi cuaderno y escribía sobre el color azul de tus ojos que se parecía al cielo de ese día y que me traían felicidad. Me preguntaste si algún día quisiese ser escritora mientras escribía sobre tu sonrisa y que me hacían acordar al atardecer y tus dientes al color de la luna, y te dije: no, no quiero ser escritora para escribir sobre personas a quienes no les importo. Y mientras dije eso, traté de describir tu sonrisa que ya ni me acuerdo como era

Los dinosaurios

Muchos pensarán que quizá haga referencia a la canción de Charly, pero no es del todo así. Hay partes que quizás se aplican. Es más divertido cuando le escribo a un público no existente pero como verán, y no sé si antes lo que escribí, sufro de trastorno de ansiedad y trastorno obsesivo-compulsivo. Lo descubrieron luego de que llegara a pesar 38 kilos y después de 6 psicólogos y el GRAN jefe de psiquiatría del clínicas. Anyway, lo que venía a decir es que está semana, o este casi último mes, estuve viviendo una montaña rusa de emociones. Uno quisiera que sean lindas, pero fueron horripilantes. No dormía, me levantaba con ataques de pánico a las 4 de la mañana y vivía con ansiedad todo el día. Un día tenía la despedida de una amiga y sentía que me volvía loca tratando de controlar el ataque de pánico. Se supone que cuando bajas de la montaña rusa, quedas un poco mareada y con adrenalina pero te estabilizas, pero no, esta montaña rusa se desmoronó y quedé atrapada. Me rechazaron en un tr

Mensajes que nunca te voy a mandar

- ¿Por qué te fuiste? ¿Por qué no confiaste en mí? Me duele mucho, lo siento en mis huesos. - Tuve que tomar una pastilla para calmarme - No entiendo porque sos tan frío - Pensé que teníamos algo especial, te confié todos mis secretos - No creo que vuelva a vos, no puedo estar con una persona tan inmadura que decide escaparse de sus problemas viajando. - Perdón, supongo que pensé que ibas a reaccionar como una persona de mi edad. - Te veo conectado y no me hablas, yo tampoco te contesté pero no podía hacerlo. - A veces tengo ganas de llorar, pero sabes que nunca me lo permito. Hoy casi lloro en terapia por problemas laborales pero también pensaba en vos. - Quisiera odiarte pero te quiero - Al final de todo, supongo que vos eras un fumador compulsivo y yo otro paquete de cigarrillos.